En el mes de las infancias, reflexionamos sobre la importancia de promover hábitos saludables para el bienestar de los niños y adolescentes. Por eso, te compartimos algunos consejos para poner en práctica y brindarles a los más chicos las herramientas necesarias para una vida plena y satisfactoria.
Mantener una alimentación equilibrada
Consumir una amplia gama de alimentos es esencial para lograr un bienestar óptimo, aumentar la energía y favorecer el desarrollo integral del organismo. Se aconseja priorizar el consumo de frutas, verduras, proteínas y cereales. No obstante, no es necesario eliminar las comidas rápidas y los azúcares, sino más bien moderar su ingesta. ¡La clave está en el balance!
Respetar los tiempos de conectividad
Establecer límites razonables para el uso de dispositivos electrónicos es crucial para evitar la fatiga visual. Por ello, es recomendable reducir el tiempo frente a las pantallas lo mayor posible, e intercalar este con actividades manuales, juegos interactivos y lectura.
Realizar ejercicio regularmente
Practicar deportes es vital para que los niños mantengan su salud mientras se divierten y aprenden. Además, contribuye al desarrollo de valores como el trabajo en equipo, el compañerismo y la perseverancia.
Dormir lo suficiente
Si bien el buen descanso es una necesidad fundamental en todas las etapas de la vida, los niños requieren de más horas de sueño ya que se encuentran en un momento crucial de su desarrollo físico y psicológico. También es recomendable evitar el uso de pantallas y actividades estimulantes justo antes de dormir, para facilitar el proceso de conciliación del sueño.
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